La raza humana está más ocupada en querer descubrir el hermoso e inmenso espacio, sin embargo, aún no ha podido conocer bien el planeta que habita. Casi tres cuartas partes de nuestro planeta están cubiertas por agua salada, y aproximadamente, el océano tiene una profundidad de unos 3.688 metros. Pero hay lugares en que el fondo marino es todavía más profundo.

Expertos recomiendan no explorar lo que vive en el fondo del mar ¿Por Que?

Tenemos como ejemplo los siguientes lugares:


  • En el Océano Atlántico: la fosa de Puerto Rico, la cual tiene una profundidad de 8.230 metros.
  • En el Océano Índico, la Fosa de Java cuenta con una profundidad de 7.315 metros.
  • El Océano Pacífico es el que posee las aguas más profundas del planeta Tierra, pues cuenta con La Fosa de las Marianas, de la cual se tiene registro que tiene una profundidad de 11.028 metros. Es tan profunda que, si se colocara el monte Everest en la fosa, su cima seguiría estando bajo el agua por más de 1.900 metros.

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¿Cómo es el fondo del océano?


A más de 11.000 metros bajo el agua, la presión es unas 1.000 veces mayor que la que se percibe a nivel del mar, las temperaturas rondan el punto de congelación y existe una oscuridad absoluta. Lo cual da un ambiente de frío y tranquilidad, sin embargo, la parte más profunda de la cual aún se está conociendo, es un lugar ruidoso. Un estudio de investigadores por parte de la Universidad Estatal de Oregón y de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica, reveló que se dejó caer un micrófono (resistente al agua) en un valle conocido como el Abismo Challenger, el cual está situado al extremo sur de la Fosa de las Marianas, y con 23 días de grabación continua, se regresó a la superficie y se lograron analizar las grabaciones, las cuales arrojaron ruidos como de terremotos, tifones y el canto de ballenas, al igual que ruidos artificiales, como los motores de los barcos.

¿Qué hay en el fondo del océano?


Según el Census of Marine Life (CoML) existen más de 17.000 especies abisales, de las cuales  5,700 viven a más de 1,000 metros. Estas se han adaptado modificando características que les permiten sobrevivir a estos ambientes, una de ellas, es la de la bioluminiscencia, que es la capacidad de producir luz propia, cualidad que les da, entre otras cosas, capacidad para escapar de depredadores, atraer presas e incluso comunicarse con otros animales. Y existen criaturas como: Caulofrino con aletas de abanico, Anoplogaster, pez Dragón, Diablo Negro, Calamar Vampiro, Pulpo Dumbo, Tiburón Duende, entre otros.

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¿Por qué no es bueno sumergirse tan profundo en el mar?

Como pudiste darte cuenta, con todos los animales que existen, las temperaturas congelantes y la presión abismal que hay en la profundidad del océano, el humano no sería capaz de soportar dicho ambiente, pues lo pondría en una situación de peligro inmediata, sin contar la falta de luz y el oxígeno, que mientras más te hundes, menos hay.

Pero seamos sinceros ¿Qué detiene al humano? (o a la ambición de este). Sólo tres submarinistas han explorado el fondo del océano: el Abismo de Challenger. Fue en 1960;  Jacques Piccard y Don Walsh (teniente de la marina estadounidense), lo hicieron en un sumergible llamado Trieste. Dicha inmersión sólo duró 20 minutos, debido a la extrema presión, y levantó tantos restos del fondo marino, que los miembros del equipo no pudieron tomar fotos.